Rihanna no anunció un nuevo álbum sino un nuevo embarazo

Rihanna emana una vibra genial sin esfuerzo, similar a cómo la respiración nos resulta natural a los simples mortales. Si bien sus fanáticos nunca la olvidan realmente, la música convertida en magnate de la belleza y la moda ha estado en el ojo público últimamente por todo menos por su música, lo que ha provocado que algunos pasen por alto su gran talento y su estilo de interpretación despreocupado y confiado. Sin embargo, su reciente regreso triunfal al escenario en el Super Bowl LVII, su primera presentación en vivo desde los Premios Grammy de 2018, fue un excelente ejemplo del estilo característico de Rihanna de grandeza impresionante y discreta.

Con un nivel de carisma que supera incluso al habitual actor de medio tiempo del Super Bowl, la cantante de 34 años aportó una claridad y energía refrescantes a todo, desde sus elecciones de vestuario hasta el diseño del escenario, sin necesidad de invitados sorpresa, excepto uno. Ni bien Rihanna apareció en el escenario, los fanáticos comenzaron a especular sobre la posibilidad de que volviera a estar embarazada, luego del nacimiento de su primer hijo con A$AP Rocky el 13 de mayo de 2022. Luego del espectáculo, uno de sus representantes confirmó a la prensa. que de hecho está esperando su segundo hijo.

Si bien hubo instancias de coreografías complejas, como durante su interpretación de "Wild Thoughts", la mayor parte del espectáculo se basó en la habilidad innata de Rihanna para cautivar a la audiencia. Durante la última década, los artistas de medio tiempo a menudo han incluido al menos un invitado inesperado, siendo la reunión de Destiny's Child de Beyoncé un ejemplo particularmente notable. Otros actos, como Maroon 5 y Coldplay, han tratado de compensar las deslucidas actuaciones sacando a la luz a numerosas estrellas de renombre. A pesar de tener la opción de elegir entre una impresionante lista de posibles coprotagonistas, incluidos Jay-Z y Paul McCartney, quienes asistieron, Rihanna fue una fuerza a tener en cuenta por sí misma.

La actuación de Rihanna logró un equilibrio entre refinado y sin refinar, completamente desprovisto de sentimentalismo excesivo, una hazaña que es difícil de lograr cuando se presenta ante una audiencia de más de 200 millones de espectadores. Cuando emergió en un escenario que recordaba niveles legendarios, Rihanna se puso un mono y un peto de Loewe, incorporando diseños de Loewe, Jonathan Anderson y Alaïa, según informó WWD. El tono rojo vibrante, en contraste con los trajes blancos y esponjosos de los bailarines, trajo a la mente un estilo audaz y minimalista. Es más, a pesar de la posible reacción negativa de los estrictos censores de la NFL, Rihanna comenzó audazmente su presentación con "Bitch Better Have My Money" (pero omitiendo la parte de perra). Este éxito de 2015 estableció el tono para el resto de la noche, ya que Rihanna se saltó algunas de sus pistas más empalagosas que todos conocemos muy bien. También interpretó un segmento de Rude Boy e hizo un guiño sutil a su canción titulada S&M durante su interpretación de We Found Love.

La actuación puede haber sido una decepción para los seguidores de R9 que esperaban al menos un nuevo debut musical, o mejor aún, un lanzamiento programado para su primera actuación en siete años. Rihanna presentó predominantemente éxitos de principios y mediados de la década de 2010, como Work y "We Found Love", y la canción más reciente fue Wild Thoughts de 2017. Mientras mostraba brevemente sus colaboraciones con Kanye West, provocó que algunos espectadores se pusieran ansiosos mientras cantaba el himno del coro de "All of the Lights".

Finalmente, la decisión de Rihanna de concluir el espectáculo con "Diamonds" fue brillante, especialmente porque la transformó en una balada impresionante y culminante. Ya sea que Rihanna utilice su actuación en el Super Bowl como plataforma de lanzamiento para recuperar su estatus como líder de la música pop, o si se concentra en expandir su imperio multimillonario y hacer crecer su familia, nos recordó que, además de su inmenso talento, es una de los mejores A-listers que tenemos. Si Rihanna opta por retirarse del ojo público una vez más, su set sería sin duda un momento inolvidable.